martes, 5 de enero de 2010

Poema

MÚSICA PARA MIS OÍDOS
Sebastián Arancibia Rojas
Alumno del taller

Lánzame a los aires
en busca de mis sinfonías
sujetame en tus notas
para dormir en tus cantares
domíname el sentido
mas oculto del astral
inunda mis oidos
con acordes de inframundos
capitula con mis ojos
toda imágen del sonido
etername en el tiempo
de tus blancas y tus ‘fusas’
juega con mis dedos
en tus percuciones fantasmagóricas
troname en la melodía
y en los montes de la composición
asesiname en las cuerdas
y resucitame en un coro
antagonizame en los tonos
de tu secreto comprimido.

CUENTO

EN LA CÁRCEL
Julio Esperguel Santander
Alumno del taller

Despierta y espera hasta las 08:15 hrs. para levantarse. Cepillo de dientes en mano, máquina de afeitar, jabón, shampoo y al baño; se asea y se viste. Espera la cuenta y ya está; al día siguiente lo mismo, todos los días lo mismo, la misma situación, las mismas escenas y aunque parezca en demasía rutinario…es bueno, la rutina es buena en la cárcel.
Una de esas mañanas, mientras se afeitaba, se miró en el espejo y comenzó a reparar en su rostro; había arrugas, han pasado más de cinco años decía. Ojos cansados, a pesar de ser temprano. Se detuvo en el espacio y en el tiempo, las preguntas que se hacía eran tácitas y concientes ¿Qué mierda hago aquí? ¿Cómo cresta fui a caer tan bajo? Con la vista perdida aún en el espejo profundizó más ¿Qué hubiera sido de mí si no hubiese cometido delitos? Seguramente estaría trabajando, tendría una gran profesión —inteligencia no me falta—, me levantaría temprano; de lunes a viernes mas o menos a las 7:00 de la mañana, descansaría los sábados y los domingos, me levantaría tarde los días feriados, tomaría desayuno con mis hijos o con alguno de ellos, los vería crecer y sus problemas serían míos, viviría tranquilo. Su mirada estaba extraviada en esa visión y prosiguió ¿Y si no hubiera consumido droga, la maldita cocaína? No hubiera engañado a mi esposa, hubiera desayunado con ella junto a mis hijos, seríamos una familia, dormiríamos juntos noche tras noche, no hubiera conocido a mi amante, no habría perdido el norte en mi vida, no estaría aquí.
Que patético se torna cuando piensa así, cuando quiere cambiar el pasado; no recuerda cuando manejaba voluntades con dinero y hasta amor. La relación que mantuvo por años con esa amante, compró la desgracia y ahora se victimiza; sin embargo ha de reconocer que insistentemente se hace de la soledad, de lugares mínimamente privados donde poder reflexionar sobre lo importante: sus padres e hijos. Ya no piensa en su esposa, no sabe de ella; no sabe que ella intenta ser feliz a como de lugar, aún a costa del odio, no sabe que intenta ser persona y rescatar lo poco y nada que dejó esa malograda relación. Su esposa de una relación que mantuvo y mantiene con su amante dio a luz un hijo, pero él en la cárcel no lo sabe, le han ocultado esa verdad. Él se procura de rutinas en el penal, dejó la droga y el cigarro y aunque sus dientes ya no son tan blancos, los cuida; reflexiona, busca la soledad, estar tranquilo. El tiempo ha pasado, todo ha cambiado y lo está asumiendo, asume sus errores.
Y aunque en las mañanas se vista de desilusión y desayune té y tostadas con desamor y engaño y camine con la desesperanza, no pierde el sentido de la vida; pareciera ser que de tanto intentar mantener su dignidad quisiera rectificar el algo su pasado o al menos su presente, pero ese camino en la cárcel es muy difícil, necesita perdonar y pedir perdón, reubicar los valores y la educación, y evadir a decenas de internos que no están dispuestos a que ello ocurra.
Quedó eternamente enamorado de su amante (ella también lo ama), pero en la cárcel no están las comodidades para mantener esta relación; no está el Sheraton para esas noches de lujuria, ni los moteles al paso para calmar la pasión, no hay autos ni drogas, no hay tiendas para comprar ropa de marca, no hay comodidades para conversar un tema mínimamente privado; tampoco está la voluntad, esa que hace que los amores imposibles se vuelvan una realidad.
Hoy, a pesar de tener otra compañera, está solo; ella no alcanza a ser una ilusión, no lo será. El amor no es para todos, es para quienes saben reconocerlo en el tiempo y espacio, es una virtud difícil de encontrar, mas aún en la cárcel.

CUENTO

VIVE LA VIDA
Luís Álvarez Vallejos
Alumno del taller

Un hombre muy adinerado, gozaba de una vida tranquila y relajada, gracias a una gran fortuna que le habia dejado su padre al morir. Su mujer y sus dos hijos complementaban la vida de este hombre de carácter apacible y despreocupado.
Su esposa era una mujer de belleza excepcional, sensata y humilde, su nombre era Estrella, el cual la describía plenamente. Ella ocupaba desde años el tiempo en el cuidado de su anciana madre, dejando un vacío entre sus hijos y ella. Estrella tenia dos hijos, uno era Juan, un adolecente que vivía la vida sintiéndose superior a todos, sin responsabilidades ni preocupaciones gracias a la fortuna que poseia su padre. Margarita era la otra hija, de un carácter sumiso y reservado, había heredado completamente la belleza y humildad de su madre, su tiempo lo ocupaba diseñando sus propios vestidos y estudiando moda en la Universidad.
El padre al heredar tanto dinero comenzó a frecuentar los cacinos de juegos y esto se le formó una rutina; tanto fue su apego a los juegos que empezó a perder gran parte de su dinero, pero nunca se pudo dar cuenta, porque no sabía lo que tenía del dinero heredado.
Él se jactaba de ser un buen padre, pensaba que con la suma que le daba a sus hijos y a su esposa estaba todo bien, dejando todo el tiempo para dedicarse a los juegos. Un día el pequeño Juan sintió curiosidad porque su padre nunca estaba en casa y porque llegaba tarde, entonces esperó la oportunidad y en un descuido se subóo a la parte trasera del auto del padre para seguirlo al lugar en donde éste ocupaba su tiempo. Al llegar Juan se bajó del auto y se encaramó en una muralla, al mirar por la ventana quedo atónito al ver tantas luces, dinero y lo peor de todo, gran cantidad de droga, tanto fue su asombro que desde aquel día nunca más dejó de frecuentar aquel lugar .Comenzó a gastarse todo el dinero que le daba su padre mensualmente, pero con el paso del tiempo este ya no le alcanzaba y no tuvo otra opción que empezar a robarle el dinero a su padre y con el correr de los años se convirtió en un adicto a las drogas .
Estrella se sentía muy culpable, pero el cuidado de su madre hacía difícil que le dedicara mucho tiempo a sus hijos, el carácter fuerte que Juan había adquirido no la dejaba acercarce a él. El padre comenzó a tener una mala racha en el juego y eso le provocó una gran perdida de dinero lo que hizo que le entrara la insertidumbre de saber cuánto dinero poseía; claro que ya era demaciado tarde pues el dinero que le quedaba solo alcanzaba para sobrevivir algunos meses, entonces tuvo que reunir a su familia y contarles la situación por la que estaba pasando e informarles que desde aquel momento les retiraría la suma de dinero que les daba.
Cuando Juan recibió aquella noticia le entró la desesperación all pensar de dónde iba a sacar dinero para sus drogas. Esto le provocó un ataque que lo deribo al hospital, su vida estaba en peligro. Se debat´pia entre la vida y la muerte, y entre alucinaciones, juan rogaba a su padre que lo ayudara a vivir para estar con su madre y su hermana.
La familia por primera vez en mucho tiempo estaba junta, el amor que se entregaban le suplía la tristeza que provocaba la enfermedad de Juan. Un día el doctor llamó a su padre y le informó que el cigarrillo había destrozado un órgano de su cuerpo y que tenía que ser transplantado lo más pronto posible. Aquella operación era muy costosa. Juan ya había salido del coma y le imploraba a su padre que no lo dejara morir pero el dinero que el padre tenía no alcazaba para costear la costosa operación, la tristeza en el rostro del padre era evidente pues él sabía que la culpa de todo la tenía el dinero y ahora ese mismo dinero los podía salvar. Al llegar a casa abrazo a su esposa y su hija y les contó lo que el doctor le había informado y todos lloraron con mucha tristeza.
Un momento padre, le dijo Margarita, tú me dabas todos los meses mucho dinero pero yo solo ocupaba lo que nesecitaba para estudiar y el resto lo guardaba, vamos al baúl de mi pieza y saquemoslo para contarlo. Al darse cuenta que les alcanzaba para la operación y recuperacion de Juan brincaron de alegría. Alto, les dica Estrella yo también tengo que decirles algo, el cuidado de mi madre me quitó toda la vida y ni siquiera tenía tiempo para gastar tanto dinero; yo también lo guardé y es tiempo de ocuparlo.
Juan con el apoyo de su familia salió completamente sano del hospital, con el dinero que la madre había ahorrado compraron un taller de costuras, Margarita con todo lo que aprendió diseñaba los vestidos, Juan repartía a las grandes tiendas, la madre atendía y vendía los hermosos diseños y el padre reunía todo el dinero que ganaban pero ya no lo malgastaban, pues sabía que todo lo que se usa mal termina mal. A la abuela al ver que la familia era felíz y siempre junta le dieron ganas de vivír y sentada en una silla acompañaba a su hija Estrella gran parte del día en sus quehaceres.
La familia con el correr de los años llegó a tener mucho más dinero que lo que el padre tenía antes pero su prioridad ahora era estar juntos.

ENTREVISTA:

Pía Barros. Mujer y Escritora. Por Cristian Rojas.

Hace pocos meses realizó el relanzamiento de su libro de cuentos La Grandmother y otros, pero este es uno más de sus hijos literarios, pues a la fecha ya ha editado más de siete obras, entre las que estan El tono menor del deseo (novela, 1991), A Horcajadas (cuentos, 1990), Los que sobran, (cuentos, 2003) y Llamadas perdidas (Minificciones, 2006), entre otros. Pía Barros es una de las más destacadas escritoras de hoy en día, y Ergo Sum, sus talleres literarios, unos de los más relevantes a la hora de buscar. Se trata de una mujer cpn mil historias para contar, con un trabajo intelectual enorme y con la dispocisión pura, para aportar siempre a la creación y encuentro de nuevos talentos.

1.- ¿ Para qué tipo de personas escribe?
En realidad, yo no pienso mucho en quien lo está recibiendo. Cuando yo corrijo un cuento y pienso en publicar ese cuento, entonces selecciono un tipo de cosa para cierto público, y pienso siempre en mujeres. Pienso, siempre que estoy escribiendo, en cómo cambiar cambiar el modo de ver el mundo, de la mujeres. Con la buena suerte que he tenido, me han leído hombres, pero yo originalmente pienso en mujeres, más que en tipos de personas. Pienso en que todas las mujeres, desde la más analfabeta hasta la más culta debiera cambiar el modo de mirar el mundo.

2.- ¿Cuál es su mensaje a la sociedad y que espera de sus lectores?
Yo no tengo mensajes para la sociedad. Estoy muy vieja, tengo cincuenta y tres y cuando tenía trece años creía que los libros podían cambiar el mundo. Pero creo que al mundo lo cambian otras cosas y creo que los libros te ayudan a entender mejor el mundo. No me creo Dios del Olimpo ni me creo alguien tocado por la varita mágica, por lo tanto creo que es un oficio como todos los demás, y me encantaría tener mensajes, pero lo que tengo son solamente modos de mirar, y claro, quiero que la gente mire en la dirección que yo miro. Y frente a eso, si miraran en mi dirección, claro que podrían haber cambios sociales, pero la sociedad es una palabra tremendamente grande, y yo no escribo para la sociedad; a duras penas para mi y los cuatro ‘pelotas’ que me leen. Y espero de mis lectores que aprendan a mirar en otra dirección. Para mi la literatura tiene que ser otro modo de mirar, el arte en general, debe ser otro modo de mirar, debe ser un modo de mirar creativo y no reproductivo.

3.- ¿Si tuviera que dejar un legado a la sociedad cual sería y por qué?
Tengo dos hijas, creo que es un tremendo legado. A ver… Yo ya pasé por la idea de que te queden tres meses de vida y lo único que pensé en ese momento es que estaba muy agradecida por la vida, y eso que he tenido una vida fácil, pero muy agradecida por la vida que me había tocado vivir, los cambios que no he visto en la sociedad, por las cosas que había experimentado, y lo unico que pensé fue “Ho, que terrible, no he alcanzado hacer el Manual de Talleres Literarios, para disfundirse en las escuelas…” Y es que llevo años haciendo talleres, soy la tallerista más antigua de este país, o por lo menos la más vieja, ya que nunca sistemáticamente he dejado de hacer talleres en treinta y tantos años, para mi eso era muy importante. Pero descubrí que tampoco importaba este libro, por que nadie es imprescindible. O sea, no pienso en los legados ni en cómo te recuerdan, siempre, lo único que pienso es que hice lo que mejor podía y que lo hice lo más honestamente posible. Entonces si tu trabajas con la verdad, y la verdad literaria es una cosa muy extraña, yo creo que haces todo a lo que puedes aspirar.

4.- ¿Cree usted que las personas leen poco a causa de los altos impuestos que tienen los libros?
Yo creo que los impuestos son un problema en los libros, porque cuando calculas que es el veinte porciento de un libro, que es la cuarta parte de su valor el impuesto, es un problema. Pero es un problema además, por que cuando sacas un libro, la imprenta te imprime con un veinte porciento más, el distribuidor un veinte porciento, y el librero otro veinte porciento, así que al final el sesenta porciento del valor de ese libro tu lo estás pagando como impuesto.
Pero ese no es el problema real. Porque muchos libros valen cinco mil pesos, pero tu eliges ir a comprar una pizza en vez de eso. El problema real de la lectura pasa por una sociedad banalizada, donde el conocimiento no tiene valor, y donde los bienes simbólicos como la cultura o el entendimiento del otro, no tiene un valor comercial; donde todo tiene un valor comercial. Entonces, no seamos hipócritas, no es un problema el impuesto del libro, el problema es la voluntad; la voluntad de aprender, la voluntad de sacrificio y la voluntad que significa para cada uno de nosotros, adquirir un bien de consumo o un bien que te dure. Los libros te duran toda la vida, la pizza dura veinte minutos, pero estamos acostumbrados a la satisfacción inmediata. Si fuera un problema de impuestos, la gente compraría menos poleras y más libros, pero la gente quiere la polera de moda y las zapatillas de moda, no quiere el libro. Hay que enseñar a que se quiera el libro, pero eso ya es otra cosa.
5.- Al momento de escribir ¿Busca hacer historia de la sociedad actual o simplemente se deja llevar por la inspiración?

Creo que todo escritor es testigo de su época, aunque sea un lugar común y un cliché muchas veces, por lo tanto yo si intento dar cuenta de la época en que estoy, si intento dar cuenta del horror al que somos capaces de llegar. Y siempre, más que mensaje social o pretenciones de cambiar al otro, lo que quiero es que la gente aprenda a leer en otro sentido y a leer leyéndose.


Yo siempre dije que los libros no me hicieron más culta pero me hicieron mejor persona, te explico por qué: cuando yo era chica, leía Sandocan y no tenía idea de la Malasia, me imaginaba una Malasia llena de mosquitos, y cuando yo llegara a Malasia alguna vez en mi vida, iba a tener un hombre moreno y de ojos verdes, estupendo, y que por supuesto me iba a coger entre sus brazos… Y conocí una Malasia que no existía sino en libros. En este momento puedo agarrar google y sé exáctamente cuantos habitantes tiene Malasia, que tienen el más alto índice de secuestros del mundo y que es un país terrible. Pero pucha, yo conocí otra Malasia a través de Julio Verne.
Cada vez que yo vi y leí un personaje yo fui ese personaje en el libro; fui puta, fui guerrillera, fui monja, fui santa. Y en la medida en que yo podía ser muchas cosas y ser muchos personajes, iba incrementando mi posibilidad como ser humano, de ser muchas personas, y también de entender lo que a otros les ocurría.
Por eso digo, uno no se hace más culto (si confunde cultura con información, que es lo que hace ahora el siglo) pero uno se hace mejor persona. Por que hay muchas personas que te habitan y tú puedes entender a mayor cantidad de personas, y tú sabes lo que te pasa. Sabes que cuando te palpitan las sienes, las manos te sudan, se te seca la lengua, tienes angustia. No tienes que romper una señalética ni pegarle al vecino, por que no sabes lo que te pasa. Yo sé lo que me pasa por que lo leí en los libros o a un personaje le ocurrió y lo que tenía era angustia. Puedo reconocer y reconocerme en el otro.

FOTOS

Lanzamiento del libro "Intentos"

Músicos invitados

Jaime Huenún, Lorena Díaz Meza e integrantes del taller

Presentación del libro




lunes, 4 de enero de 2010

ENSAYO

EL BOOM DE LA NARRATIVA HISPANOAMERICANA CONTEMPORÁNEA
Alonso Berríos.


La novela Hispanoamericana irrumpe en el mundo lector durante los años cincuenta a sesenta. Por supuesto ya hacía tiempo que contaba con un público fiel, de especialistas y aficionados. La nueva atención, sin embargo fue un asunto del todo distinto, mucha gente se encontró interesada en Hispanoamérica, como resultado de leer su literatura y no al revés. Esta reacción de los lectores es significativa, puesto que muchas novelas anteriores eran pintorescas o exóticas, quizás como los libros de viajes; también se mostraban temas costumbristas y regionalistas. Todo esto sin desmerecer todo lo bueno que antes había y que sentó la “herencia” ,por decirlo así, para la narrativa que comenzó en esa época. Todo este interés tiene indudablemente una explicación básica; la narrativa comenzó a tener más originalidad que antes y es probable que los libros nos suministren a una experiencia válida.

El “Boom” es la palabra que se suele emplear para explicar el fenómeno de los años sesenta en adelante en Hispanoamérica misma y en otros países. El fenómeno del interés del público es sin lugar a dudas del todo justificado, porque la cantidad de novelas de alta calidad ha aumentado enormemente, así como el empuje de la publicidad obtenida por autores de renombre internacional como Carlos Fuentes, Gabriel García Márquez o Mario Vargas Llosa. Los catalizadores son escritores de generaciones anteriores como Juan Rulfo Y Julio Cortázar y de generaciones más recientes como Miguel Ángel Asturias y Jorge Luis Borges, que han contribuido con su notoria obra al empuje del fenómeno de la narrativa Hispanoamérica.

El “fenómeno” que sufre la narrativa actual no se trata del comienzo de éste, donde termina otro, sino un proceso de cambios progresivos, estimula la invención y la innovación. Los factores ideológicos han jugado un papel preponderante dentro de la narrativa Hispanoamericana, donde el principal tema es la protesta, ya sea social o política, sin embargo ha adquirido paulatinamente una actitud vanguardista respeto a la técnica narrativa y de la invención de la realidad, matices regionalistas indudablemente, pero un regionalismo íntimo y trascendente que produce en el lector la experiencia de estar frente a un cuadro o collage, que a una narración satisfactoria. La más notable de esta época en la narrativa, es una evolución hacia una novela de ansiedad, basada en la identidad personal, donde el autor reafirma el derecho de crear su propio mundo. La innovación principal se relaciona con la insatisfacción del hombre con las señas, los símbolos y las formas de la cultura y sociedad que ha creado. Este ánimo no ha producido la novela de la juventud disidente y una aparente anarquía a la creación de la ficción.

Nos queda entonces seguir presenciando desde nuestra privilegiada butaca de este espectáculo notable. El hecho de que una cultura produzca este tipo de literatura nos indica un grado de madurez cultural que no tiene un horizonte definido, involucrando desde allí a todas las demás manifestaciones del arte, y como se ha visto en otras culturas, la vida de todos nosotros.

domingo, 3 de enero de 2010

ENTREVISTA:

Diego Muñoz Valenzuela.

1. Hay escritores que primero escriben el nombre de su cuento o novela y luego basándose en él, escriben, ¿cuál es la técnica que usa usted y por qué?
En el caso de un cuento, primero tengo una idea, un bosquejo de lo que va a pasar en la historia, los personajes y acciones principales. Luego escojo la manera de narrar, tiempo, hablante, técnica de escritura. Al último emerge el título, como consecuencia de la historia; esto es lo normal (a veces acontece al revés, o se a partir por el título, raramente en mi caso)

2. Usted aparte de ser escritor es ingeniero civil, químico y magíster en ciencias de la ingeniería. Si tuviera que poner en una balanza estas tres profesiones ¿Cuál definiría como la más importante?
Lo más importante de lejos en mi vida es la escritura. Lo más trascendente. Soy yo mismo en plenitud cuando escribo.

3. Sabemos que lo suyo es la narrativa, pero si tuviera la oportunidad de escribir un libro de poesías ¿La tomaría o la dejaría pasar?
Escribí poesía al inicio, publiqué una que otra cosa en revistas; incluso gané algunos premios, si mal no recuerdo. Mi admiración por la poesía es enorme; leo mucha poesía. No puede haber un narrador que no se nutra de poesía. Sin embargo, conscientemente, dejé de escribir poesía, entendiendo que no es el género en que me siento más efectivo; por respeto, pudiera decirse. Ahora la pregunta. Más que oportunidad, lo que tendría que ocurrir es que sintiera nacer en mí a un poeta de verdad. Y eso no ha ocurrido, pero tampoco puedo descartarlo. Si así fuera, escribiría poesía.

4. ¿Qué piensa usted sobre las personas marginadas que por medio de la escritura desean reintegrarse a la sociedad?
Yo escribo porque en muchas formas me siento marginado, soy marginado, o quiero serlo. Si no fuera así, tal vez no escribiría.LA marginación puede ser una poderosa fuente de creación.

5. A usted como escritor ¿Le ha interesado en algún momento de su vida escribir un libro basándose en nuestras historias y vivencias (de presos)?
No, por la sencilla razón que me parece que esa es tarea vuestra. Yo escribo de lo que vivo o sueño, de lo que imagino, del mundo en el que estoy inserto.

6. A sus 53 años ¿Cuál ha sido su mayor logro como escritor?
Hacer de mi trabajo de escritura un oficio de ejercicio regular y permanente. Escribir todos los días con disciplina y rigor. De otra parte, por cierto que otras personas –profesores, editores, investigadores, periodistas, críticos y lectores- manifiesten su valoración de mi trabajo literario siempre es grato y sorprendente. Y estimulante, sin eso quizás no habría seguido adelante. Que este aprecio, manifestado en la forma de inclusiones en antologías, revistas y más recientemente en la forma de libros propios (se acaba de publicar en España mi novela FLORES PARA UN CYBORG) y este año se publicará en Croacia el volumen de cuentos LUGARES SECRETOS, viene a ser una forma mayor de reconocimiento que me da gran satisfacción y alegría.

7. Todos en la vida tienen un fin por el cual lucha, ¿Cuál es su fin? ¿Qué pretende alcanzar en la vida? ¿A qué le gustaría llegar por medio de las letras?
Yo lucho para que la gente lea más cada día, para que crezca con arte literario, se desarrolle, sean mejores personas. Mi literatura se enfoca a generar memoria de la vida de mi país y mi tiempo. Sólo aspiro a poder vivir libre y dignamente como escritor.

8. Si quisiéramos seguir sus pasos ¿qué nos aconsejaría para no morir en el intento?
Escribir por escribir, sin esperar nada. De ese modo cualquier reconocimiento es un regalo. La única razón para poder escribir, es disfrutar haciéndolo, siendo rigurosos, esforzados en el trabajo de la escritura. Es un oficio artesano, se puede aprender de los maestros leyéndolos, o en talleres literarios; pero también se aprende mucho haciendo, escribiendo mucho, corrigiendo, revisando sin piedad los propios escritos. La principal recompensa por escribir, es el disfrute del acto mismo. No hay nada que yo pueda hacer que supere en plenitud al acto de escribir.

9. ¿Es importante o relevante para usted asistir a lugares como la cárcel, donde pocas personas creen en nosotros?
Tan relevante es, que dirigí por un año un taller en el CDP de Santiago. Conozco bien esta realidad, compartí –hasta donde pude- la experiencia con detenidos por larga data. Y creo en la literatura como método de existir y sensibilizarse ante el mundo, y eso vale para todas las personas.

10. Como estamos recién conociéndolo y familiarizándonos con su escritura ¿Qué libro suyo nos aconsejaría para leer primero? ¿Por qué?
Es tan difícil de responder esta pregunta… no se imaginan. Es como escoger al mejor entre nuestros hijos: todos son queridos por diversas razones. Y todos tienen su vida propia. Pero intentaré responder de todas maneras. Creo que lo más inmediato, lo más fácil de leer –aunque paradójicamente lo más profundo y lo más complejo de asimilar- son los microcuentos: cuentos brevísimos, pocas líneas o pocas páginas. Hay dos libros publicados: ANGELES Y VERDUGOS y DE MONSTRUOS Y BELLEZAS. Respecto a libros de cuentos, LUGARES SECRETOS obtuvo un premio importante que lo abala; y será publicado en Croacia dentro de poco tiempo. Y novelas, FLORES PARA UN CYBORG, una mezcla de género negro, ciencia ficción y novela social, es al menos entretenida y llena de acción.